QUIERO ESTAR DISPUESTA
![](https://static.wixstatic.com/media/26b68b_57fa137ae93346089b6a01c95ae1cdb2~mv2_d_2301_3078_s_2.jpg/v1/fill/w_980,h_1311,al_c,q_85,usm_0.66_1.00_0.01,enc_auto/26b68b_57fa137ae93346089b6a01c95ae1cdb2~mv2_d_2301_3078_s_2.jpg)
Quienes me conocen saben perfectamente que soy una persona súper quejosa, me quejo de casi todo y me enfoco mucho en los defectos, me escudo en decir que soy "realista" y la verdad es que ser tan quejosa me lleva a desanimarme ante muchos retos y oportunidades. Ya iniciamos el año y la verdad hice un análisis de lo que había vivido el año pasado, de mis actitudes y sobre lo que había pasado en el 2018, y se me vino a la mente lo que quería y debería cambiar para este nuevo año.
Lo primero que se me vino a la mente y sentí que fue completamente de Dios es que para dejarme de quejar de todo, no debería enfocarme en "no quejarme", sino enfocarme en estar dispuesta; a ser parte de la solución, de proyectos, de servicio... no es decir a todo que sí así nada más, sino de tener un corazón más dispuesto a conocer cosas nuevas, a explotar talentos y habilidades, cambiar mi actitud por una más amable y servicial, a amar a los demás, a ser más humilde y a analizar cómo se puede mejorar en todo aspecto.
Hay grandes planes para este 2019, sin duda alguna. Quiero cumplir con muchos retos y llegar a metas para luego volverme a plantear nuevas, pero seguro eso no va a suceder si yo no estoy dispuesta a lograrlo, a escuchar a otros, a leer más, a documentarme con lecturas, a pasar más tiempo estudiando la Biblia, haciendo tiempo para orar y estar en comunión con Dios.
En definitiva, este año quiero que sea intencional. Quiero que las cosas sucedan porque las voy a poner en marcha y no solo conformarme con un "es que tenía que suceder". Y es que los cambios suceden cuando nosotros los buscamos, cuando nosotros no solo proponemos, sino trabajamos y estamos dispuestos.
Para Dios un corazón dispuesto es una tierra fácil para sembrar semilla y trabajarla. ¿Quieres dar fruto este 2019? Comienza siendo esa tierra dispuesta a ser trabajada, qué importa si piensas que estás hecho un desierto seco sin probabilidad de lluvia, Dios abre caminos en el desierto para que corran ríos; Dios da vida a lo que estaba muerto, Él puede crear un jardín en el desierto. Es cuestión de estar dispuesto. Yo quiero estar dispuesta.